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The Black Crowes : Solo ellos y su música

Yo deseaba ir a este Vive Latino 2023 por ver a The Black Crowes… y la espera de 30 años valió la pena. Cuando los anunciaron no pude dejar de pensar en aquel LP que puse muchas veces en la tornamesa en casa de mis padres, “Shake your money maker”, el cual ahora celebran con una nueva edición en vivo.


La noche de domingo 19 de marzo era ideal, fresca, la gente divirtiéndose con las bandas tocando en 5 escenarios distintos, lucha libre, y cerveza: mucha, mucha cerveza.

La banda originaria de Atlanta, Georgia llegó por primera vez a nuestro país 3 décadas después de haber grabado su primer disco, y una breve y reciente gira por Brasil, Chile y Argentina.

Minutos antes de iniciar la presentación se escuchaba Blues y  Boogie, hasta que sonó Are you ready? de The Grand Funk Railroad, lo que anunciaba la salida de los cuervos al escenario llamado Escena Indio (En el estadio Martinez Palillo).

En el Foro Sol, casi a la misma hora, tocaban los Red Hot Chilli Peppers,  acto al cual se abalanzó mucho público y tal vez por ello, poco con The Black Crowes.

La banda de los hermanos Chris y Rich Robinson inició su presentación con la energía contundente de “No speak, no slave”. Chris, enfundado en pantalón negro y saco de lentejuelas del mismo color nos recibió con un “Hola muchachos”, al tiempo que hizo la señal para interpretar inmediatamente “Sting me”, misma que el público reconoció de inmediato. 

Le siguieron “Twice as Hard”, “Wiser time” y “Thorn in my pride” en una versión de cerca de 10 minutos, en la cual el vocalista interpretó la harmónica y alternaron las guitarras de Rich y Nicolás Bereciartua.

Para este momento ya había quedado muy en claro que estábamos frente a una banda muy sólida, cuyo objetivo principal es el de brindar su música, su blues, a la gente que los siga.


“She talk to angels” cayó  como del cielo poniendo a cantar a la mayoría. Éramos muy felices, pero no nos dimos cuenta que estábamos ya en la segunda parte del show. Solo faltaban 3 canciones: las tres décadas de espera estaban por iniciar un nuevo lapso.

 Tuc, tuc-pa, tuc-tuc-tuc tuc-pa, la batería nos anunciaba “Hard to handle” (original de Otis Redding), la cual sonó como si no hubiera pasado tanto tiempo, limpia, precisa.  

El complemento ideal fue por supuesto “Jealous again”, abrigadora, para cantarse acompañando a Chris, que nos compartía la penúltima canción de la presentación.

Estaban por terminarse los 50 minutos pactados con Vive Latino y para complementarse tocaron “Remedy” en la cual nuevamente los solos de guitarra se hicieron presentes; Chris y sus coristas se lucieron también.  

50 minutos bien aprovechados.


Queríamos más y lo pedimos, pero la banda simplemente se fue con un breve adiós.

The Black Crowes dejó un buen sabor de boca, nos endulzó el oído sin escenarios espectaculares, ni grandes manejos de las luces, solo ellos y su música. Fuimos felices y lo sabíamos. No sabemos cuánto tiempo va a pasar para poder verlos de nuevo; de hecho ni siquiera sabemos si los volveremos a ver. Empieza la nueva cuenta, espero no sean décadas otra vez.


Reseña de: Ruben Martinez “El Viajero”
Instagram: viajero_rrubmf
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