Un 22 de marzo, pero de 1993 la banda británica Depeche Mode lanzó su octavo álbum de estudio, llamado “Songs Of Faith And Devotion”, el último disco que la agrupación grabó con el músico Alan Wilder.
Para grabar este álbum, los miembros de la banda vivieron juntos durante ocho meses, en Madrid, España. Y estuvo listo después de sesiones de grabación y mezcla en Hamburgo y Londres.
A pesar de que los meses de convivencia resultaron en un excelente disco, los integrantes de la agrupación han dicho en diversas entrevistas que fue muy complicado el proceso. Por ejemplo, el productor del álbum Flood, señaló que en un principio pensaban que sería una experiencia maravillosa, pero “fue un disco increíblemente difícil de hacer, muy difícil”, ya que la convivencia no fue tan sana como esperaban.
Una de las mayores preocupaciones de Depeche Mode en ese momento era el éxito de su álbum anterior “Violator” (1990), por una parte no querían hacer un “Violator 2”, pero tampoco querían disminuir la calidad de las canciones en el disco nuevo.
Si te interesa conocer a detalle los pormenores de la creación de “Songs of faith and devotion”, te dejamos el documental completo que los narra:
y ahora, cada vez que escuches las canciones que lo componen, vendrá a tu mente lo complicado de su producción.
